Lo que en principio iba a ser una aventura que duraría 12 días, se vio reducida a tan sólo 7. El mal tiempo y problemas con la aclimatación de algunos de los miembros del equipo impidieron que llegásemos hasta la cumbre.
La cita con el Huascarán comenzó en el pueblo de Musho donde 11 mulas y 8 porteadores nos esperaban para comenzar una caminata de 4 horas que nos llevaría hasta el campo base a 4300 metros de altura.
2 días después nos dirigimos hacia el campo 1 situado a 5300 metros en medio del glaciar, donde pasamos nuestra primera noche en nieve y a dicha altura. Para algunos de los miembros del equipo ésta fue la máxima, ya que por problemas de aclimatación tuvieron que abandonar el intento de cumbre.
A la mañana siguiente el resto del equipo se dirigió al campo 2 a 6000 metros. Para poder acceder a el tuvieron que atravesar una zona complicada de grietas y escalada en hielo. Pasada la noche y debido a problemas con la altura, el equipo decidió bajar de la montaña al día siguiente y desistir de cualquier ataque a cumbre.
La cita con el Huascarán comenzó en el pueblo de Musho donde 11 mulas y 8 porteadores nos esperaban para comenzar una caminata de 4 horas que nos llevaría hasta el campo base a 4300 metros de altura.
2 días después nos dirigimos hacia el campo 1 situado a 5300 metros en medio del glaciar, donde pasamos nuestra primera noche en nieve y a dicha altura. Para algunos de los miembros del equipo ésta fue la máxima, ya que por problemas de aclimatación tuvieron que abandonar el intento de cumbre.
A la mañana siguiente el resto del equipo se dirigió al campo 2 a 6000 metros. Para poder acceder a el tuvieron que atravesar una zona complicada de grietas y escalada en hielo. Pasada la noche y debido a problemas con la altura, el equipo decidió bajar de la montaña al día siguiente y desistir de cualquier ataque a cumbre.
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